Hurlingham: inauguraron la nueva guardia del Hospital San Bernardino
Con una fuerte apuesta a mejorar el acceso a la salud y la eficiencia del sistema público, el Municipio de Hurlingham inauguró oficialmente la renovada guardia del Hospital Municipal San Bernardino. La obra, impulsada por el Estado local, incorpora una separación entre la atención pediátrica y la de adultos, una mejora que no solo ordena la demanda, sino que reduce los tiempos de espera y optimiza la experiencia de quienes acuden al centro de salud.
Entre los principales cambios se destacan la incorporación de cuatro nuevos consultorios y un moderno sistema de Triage que permite clasificar a los pacientes según su estado y necesidad de atención. A ello se suma un sistema digital de turnos que permite monitorear en tiempo real la eficiencia en la atención médica.
«Ahora vamos a poder controlar de manera centralizada cuánto tiempo tarda cada paciente en ser atendido y nos permite garantizar que la atención sea cada vez más eficiente», expresó el intendente Damián Selci durante la inauguración. Y agregó: «Con cada renovación, damos un paso adelante para que Hurlingham esté cada día mejor».
Esta intervención se enmarca en una serie de políticas de salud que viene llevando adelante la gestión municipal. En el último año se implementaron los servicios de Telemedicina Pediátrica y Obstetricia, además de la apertura del Centro de Salud Mental Juvenil, una iniciativa pionera en la región.
La obra en el San Bernardino no solo representa una mejora edilicia, sino también una transformación en el enfoque del sistema público de salud, que busca ser más cercano, accesible y moderno. A esta inversión en infraestructura humana y tecnológica se suma también la reciente apertura de la Clínica Veterinaria Municipal en Villa Tesei, que cuenta con quirófanos, consultorios y equipamiento especializado para mascotas, ampliando así la cobertura sanitaria a toda la comunidad.
La nueva guardia, ya en funcionamiento, promete ser un punto de inflexión en la calidad del servicio de salud que reciben las y los vecinos de Hurlingham. Una muestra más de que la salud pública puede y debe estar a la altura de las necesidades de su gente.